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Persuasión y un bodrio para el Reto 13 lecturas

Este verano la verdad es que no he leído demasiado, pero ha sido volver a la rutina y empezar a leer de nuevo.
Así que ahí van dos libritos más.
Uno ha sido Persuasión de Jane Austen.
 
 

Hay trenes que sólo pasan una vez, pero no es el caso de la trama de este libro que habla de las segundas oportunidades que las vida nos regala.
No es un novelón, pero me ha gustado.
De lectura muy amena.

El otro libro es El libro más bello del mundo y otras historias, de Eric-Emmanuel Schmitt.
Un bodrio.
Un b-o-d-r-i-o



Me compré este libro (menos mal que era barato) porque me gustó la portada, y también porque ya me había leído otros libros de relatos cortos (de otros autores) que me habían gustado bastante.
Sólo puedo decir que tras leer este libro me he planteado hacerme escritora. Porque si este buen señor es capaz de publicar un libro ¿por qué no lo voy a poder hacer yo?.
Son relatos a mí gusto pésimos. Relatos que vas leyendo y que te crean más o menos alguna expectativa para al final encontrarte con un final insulso y más simple que un botijo.
Luego a parte,  quedaba deprimida cada vez que cerraba el libro para irme a dormir. Cada historia era un drama, cada relato narraba una desgracia. Vidas desgraciadas de mujeres.
Joder que no te pongan esa portada tan mona!
Tan negativamente asombrada me quedé que busqué información en internet. Este señor había escrito este libro entre toma y toma de una película que dirigió o produjo (no me acuerdo la verdad).
Si es que no se pueden hacer dos cosas a la vez.
 
Besos y Feliz Domingo.


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Narración atrasada de mis vacaciones ¡Upsss!

Aunque las vacaciones las tengo más que olvidadas (llevo ya 1 mes trabajando), os cuento que en Agosto estuve unos días en Peñíscola.
Es la segunda vez que voy allí y como ya dije la primera vez, volveré.
Fueron unos días de relax, comiendo, descansando, playita, piscina, callejeando por el pueblo, mirando tiendecitas, visitando el castillo...
Las vistas desde el castillo son impresionantes. La primera vez que fui ya me quedé fascinada. Miras al horizonte y sólo ves el mar. El mar y el cielo unidos, cada uno con una tonalidad distinta de azul.
Es precioso.
 
 
Este es el hotel en primera línea de playa en el que estuvimos.


Y esta es una de las muchas vistas bonitas que se ven desde el castillo.

 
 

En el hotel había Spa así que una tarde contratamos un circuito. ¿Os podéis creer que nunca había estado en un Spa?. Me quedé relajada no, lo siguiente.
Los jacuzzis, la piscina de chorros, el masaje... todo estuvo genial pero si hay algo que me alucinó fue sin duda la bañera de hidromasaje con aceites esenciales.
Una bañera con agua burbujeante, calentita y de de color vino (supongo que por los aceites esenciales y algún que otro potingue que olían de maravilla). Te metes ahí, y te empiezan a salir chorros que de manera sincronizada vas notando en la espalda, en las piernas, en los brazos.... La habitación con una luz tenue y música relajante de fondo. Buahh por Dios, estuve en la gloria durante casi media hora.
La bañera era parecida a estas que he encontrado por Internet.
 
 
 
 
Me costó salir de allí de lo agustito que estaba.
Salí del circuito renovada, relajada, con la piel súper suave y un olorcito...
 
Tengo que buscar algún spa en Valencia que tenga este tratamiento porque no todos los spas lo tienen.
 
Así que si tenéis oportunidad de ir a Peñíscola y también de probar algún día una bañera de éstas ¡No os lo penséis!
 
Besitos y nos vemos por aquí, que tenía el blog un poco abandonadito.
 


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Frase Inspiradora

"Sólo aquellos que se arriesgan a ir más lejos podrán saber lo lejos que pueden llegar"